¿Qué es el contorno de ojos y cómo cuidarlo?

En ese sentido hay que tener en cuenta que, cuanto más delgada y deshidratada sea la piel, más signos de cansancio va a mostrar.
¿Qué podemos hacer para cuidar el contorno de ojos? Incorporar hábitos que ayuden a retrasar esa aparición de señales de envejecimiento y empezar a brindarles cuidados específicos desde temprana edad.

El contorno de ojos es el área que rodea a los ojos, también conocida como área periocular. Extremadamente frágil, tiene la piel más fina de todo el cuerpo (su espesor mide entre 0,03 y 0,05 mm) y es pobre en glándulas sebáceas, colágeno y elastina.

El cuidado del contorno de ojos es una de las problemáticas que más preocupan a las personas en cuestiones de cuidado de la piel. Tomá nota de esta lista de hábitos que te van a ayudar:

Desmaquillar siempre. Aunque estemos cansados, lleguemos tarde y no tengamos ganas, sí o sí hay que quitar el maquillaje de los ojos con un aceite o bálsamo.

Elegir tratamientos de acuerdo a las necesidades de la piel según la edad. Si bien humectar la zona es súper importante a cualquier edad, no es lo mismo un producto hidratante que puede ser suficiente a los veinticinco años que un suero antioxidante, sugerido para después de los cuarenta.

Hacer movimientos ascendentes. Es conveniente aprovechar cada aplicación de un producto específico para hacerlo con el dedo anular, que es el que tiene menos fuerza, dando pequeños toques suaves, sin estirar la piel ni masajearla.

Dormir ocho horas. La falta de descanso tiene consecuencias: los músculos se tensan y ahí es cuando se notan más las arrugas y las ojeras.

Tomar mucha agua. Es la mejor forma para mantener las células bien hidratadas y así impedir el envejecimiento prematuro en la zona del contorno de ojos.

Usar accesorios en frío. Pueden ser rodillos, rollers, aplicadores roll ons… el uso de estas herramientas frías descongestiona los párpados y estimula la circulación sanguínea.

Si bien todos los productos para contorno de ojos están formulados para hidratar y descongestionar, existen algunos para tratar problemas específicos: para bolsas y ojeras (son ideales los que tienen activos como hammamelis), para arrugas y patas de gallo (mejor los que contienen retinol) y para combatir la flacidez (elegir con péptidos).

Con cualquiera de ellos resulta muy conveniente seguir este protocolo de aplicación: poner una pequeña cantidad de producto (el equivalente a un grano de arroz) en la yema del dedo anular y repartirlo alrededor del hueso que limita la cavidad ocular. Después, aplicarlo también en las ojeras y encima de las cejas.