mujer luego de una rutina facial

Paso a paso de una rutina de limpieza facial

La limpieza facial es fundamental para que la piel se vea sana, confortable y luminosa, que los poros queden libres y puedan respirar. Y es imprescindible hacerla dos veces por día: a la mañana y a la noche. Conocé el paso a paso para poder realizar esta rutina de la mejor manera posible.

mujer sonriendo

La nocturna es la más importante porque después de un día largo hay que quitar del rostro restos de maquillaje y las impurezas que puedan quedar del contacto con la contaminación exterior, el viento, el frío o el calor (aunque no te maquilles la limpieza es necesaria para eliminar la polución diaria que se adhiere a la piel).

Hay dos aspectos clave a tener en cuenta al realizar una rutina de limpieza facial:

Saber con precisión qué tipo de piel tenemos y qué productos de higiene son los más adecuados para ese tipo cutáneo.
● Cambiar la rutina de limpieza de acuerdo a la estación del año, porque la piel no requiere los mismos cuidados en invierno que en verano.

mujer haciendo rutina facial
manos de mujer antes de hacer una rutina facial

Beneficios de una buena limpieza facial

Las cremas, sueros, contorno de ojos y máscaras no harán milagros por nuestra piel si antes no hemos cumplido con una buena limpieza. Apuntá estos datos:
Retarda la aparición de arrugas y líneas de expresión.
Elimina impurezas y células muertas.
Remueve granitos y puntos negro.
Estimula la absorción de productos cosméticos que se usen después.
Oxigena la piel.
Aporta suavidad y tersura.
Regula el acné.
Cualquier producto de maquillaje lucirá mejor en un cutis limpio.

mujer aplicándose crema en el rostro

Paso a paso de una rutina de limpieza facial 1) Lo primero es limpiar la piel con una leche, emulsión o con agua micelar, para quitar cualquier vestigio de maquillaje y suciedad. El producto se aplica con un disco de algodón, llegando hasta el último rincón para arrastrar toda la suciedad de la cara (para pieles secas van bien las leches y emulsiones, con las grasas o mixtas se llevan mejor las espumas y las que tienen tendencia acneica deben optar por un gel, que suelen tener fórmulas para controlar el exceso de sebo y el acné). Si usamos máscara de pestañas es conveniente usar otro disco de algodón para los ojos, así se logra una higiene más profunda (el agua micelar es infalible con las máscaras de pestañas a prueba de agua). Después hay que lavar el rostro con abundante agua y secar suavemente con la toalla, sin apretar ni refregar.

2) En segundo lugar, va el tónico, que equilibra el pH cutáneo y reduce el tamaño de los poros, dejando la piel suave y lista para recibir los productos siguientes (su consistencia líquida ayuda a que penetre rápidamente). Y, también en ese caso, se usa un disco de algodón y se deja que el producto se absorba. Entonces toca seguir con el siguiente paso que es la hidratación, vital para aportarle a la piel los nutrientes y vitaminas que necesita, mantener su humedad y su efecto barrera.

3) Si usamos sérum, se aplica primero, evitando el área de los ojos y dejando que se absorba en su totalidad. Y atención: el sérum no reemplaza a la crema, sino que la complementa, así que sí o sí después es el turno de la crema. Si usamos crema para el contorno de ojos este es su momento, antes de la crema específica para el rostro. Y recién después va la de cara, ya sea hidratante, antiage, o noctura, según el tipo de rutina de cada persona. En el caso de que la crema que elegimos para el día no tenga SPF el último paso es la protección solar: nunca olvidemos aplicar protector, tanto en invierno como en verano.

Conocé todos nuestros productos de Cuidado y Limpieza Facial haciendo click acá.

Siempre que tengas dudas, recomendamos que siempre lo consultes con un médico especialista, para que te evalúe de manera profunda, haga un diagnóstico y recomiende los productos o tratamientos indicados según tu problemática