Persona con verrugas en el rostro

¿Cuáles son los principales tipos de verrugas en la cara?

Las verrugas siguen siendo uno de los temas más atendidos en clínicas de dermatología. Identificar una verruga es bastante simple, sin embargo, es importante saber diferenciar de qué tipo de verruga se trata para poder aplicarle el tratamiento adecuado. Aunque las más comunes son de origen viral, no todas lo son y, por ello, deben ser tratadas y analizadas por profesionales.

Tipos de verrugas en la cara

Verrugas víricas:

  • Verrugas vulgares: son las que aparecen con mayor frecuencia. Normalmente, suelen tener una forma redondeada, suelen aparecer aisladas y tener un tacto áspero o rugoso. Pueden aparecer en cara, cuello o cabeza, aunque lo más normal es manos y pies.
  • Verrugas planas: suelen presentar un color blanquecino, son de tamaño más pequeño y aparecen normalmente en forma de racimo. Aunque son más comunes en niños y adolescentes, también pueden aparecer en adultos.

Verrugas no víricas:

  • Verrugas filiformes: también conocidas como fibromas péndulos o acrocordones del cuello, son un tipo de verrugas de forma alargada de tacto blando, color marrón y unidas a la piel por una fina capa de piel. Al no ser víricas no son contagiosas pero sí pueden ser hereditarias. No suelen provocar dolor y desaparecen solas frecuentemente.
  • Queratosis seborreicas: son lesiones que suelen comenzar teniendo un color pimentón pero se van oscureciendo con el paso del tiempo. Aparecen normalmente en cara, escote, abdomen, y espalda y según van creciendo en el tiempo adquieren más relieve y el aspecto verrucoso pero no son verrugas.
  • Nevus o lunares protuberantes: Son lesiones pigmentarias o no, elevadas, redondeadas, de tacto blando, y suelen ser hereditarias, más comunes en la cara y zonas expuestas al sol como la espalda. Pueden evolucionar a lesiones malignas, por lo que se deben revisar periódicamente.
  • Queratosis seborreicas: Son lesiones producidas por capas de queratina y grasa de la piel, al principio son como pequeñas pigmentaciones de color claro, pero con el tiempo se oscurecen y se pueden confundir con manchas solares. Se localizan sobre todo en cara, escote, abdomen y espalda

Las verrugas no siempre necesitan tratamiento específico, ya que aproximadamente un tercio de ellas desaparece espontáneamente a los seis meses de haber brotado. Además, si no causan molestias o dolor, no crecen y no es estrictamente necesario eliminarlas.

No obstante,las que sí causan molestias o nos molestan por razones estèticas pueden eliminarse de diferentes maneras. Es importante recordar que antes de recurrir a cualquier método casero o remedio popular es imprescindible consultar con un especialista.

Víricas

  • Verrugas vulgares. Son las más frecuentes. Son redondeadas, pueden aparecer agrupadas aunque lo más frecuente es que aparezcan como lesiones únicas, de tacto rugoso incluso pueden tener forma filiforme. Se forman en el dorso y palmas de las manos, en las plantas de los pies, entre los dedos y a veces en la cara, el cuello y el cuero cabelludo. Su origen es el virus del papiloma humano o VPH y son muy contagiosas y pruriginosas (es decir, que causan picor).
  • Verrugas genitales. Son los condilomas acuminados, producidos por el virus del papiloma también. Son de tacto más blando y a veces tienen forma de coliflor, cuando son muy numerosas. Se localizan en cualquier zona del área genital (pene, vulva), en las ingles y en la región perianal. Son muy contagiosas, ya que la mucosa urogenital es más delicada y susceptible de sufrir erosiones y heriditas que facilitan la entrada del VPH. Se transmiten durante las relaciones sexuales. Son también muy pruriginosas.
  • Verrugas subungueales y periungueales. Se denomina así a las verrugas que aparecen bajo las uñas o alrededor de estas, respectivamente. Están producidas por el papilomavirus también.
  • Verrugas planas. Son más frecuentes en niños y adolescentes. No sobresalen demasiado y su color suele ser más blanquecino y similar al de la piel que el resto de verrugas comunes. Son de pequeño tamaño y se distribuyen en grupos o racimos. Suelen aparecer en el rostro y dorso de las manos.
  • Verrugas plantares. Más conocidas como papilomas plantares, por su localización en los pies. Esta localización hace que sean muy dolorosas al andar o calzarse, por lo que casi siempre requieren de tratamiento que las elimine en lugar de esperar a que desaparezcan por sí solas. También están producidas por el virus del papiloma.
  • Molusco contagioso. Son abultamientos redondos, pequeños y de tacto firme. No son dolorosos, pero sí pruriginosos. Más frecuentes en niños, en los que el rascado hace caer la lesión y con ello, la propagación. Están producidas por el virus molluscum contagiosum.
  • Fibromas péndulos del cuello o verrugas filiformes o acrocordones del cuello. Son formaciones alargadas que tienen la unión a la piel por una parte que se afina, son de tacto más blando y color marrón oscuro. También pueden aparecer en los párpados. No son víricas y no son contagiosas. Suelen ser hereditarias. A veces se desprenden solas, y se enganchan con las cadenas colgadas al cuello. No suelen producir picor.
  • Nevus o lunares protuberantes. Son lesiones pigmentarias o no, elevadas, redondeadas, de tacto blando, y suelen ser hereditarias, más comunes en la cara y zonas expuestas al sol como la espalda. Pueden evolucionar a lesiones malignas, por lo que se deben revisar periódicamente.
  • Queratosis seborreicas. Son lesiones producidas por capas de queratina y grasa de la piel, al principio son como pequeñas pigmentaciones de color claro, pero con el tiempo se oscurecen y se pueden confundir con manchas solares. Se localizan sobre todo en cara, escote, abdomen y espalda.
  • Puntos rubí. Son lesiones redondeadas, de tamaño que varía desde un punto a varios milímetros. Su origen es vascular, es decir, un acúmulo de vasos sanguíneos, por ello son de color rojo. Muy frecuentes en tórax, abdomen y espalda.

¿En qué zonas del cuerpo o cara suelen aparecer las verrugas?

Según su origen, las víricas son más frecuentes en manos, pies y cara. Las no víricas, en el cuello, como los fibromas; abdomen y espalda, como los puntos rubí; cara y escote, como las queratosis seborreicas.


¿Cómo se tratan las verrugas? ¿Es necesario hacerlo?

“El método más común para tratar las verrugas víricas es la crioterapia o congelación de la lesión. Y las no víricas, con electrocoagulación o láser de CO2. Los puntos rubí se tratan con láser vascular de Neodimio”, señala Lagüéns.
Además, la experta concreta que “las verrugas no víricas se tratan por estética, salvo los lunares que producen cambios de color o abultamientos, que sí se deben eliminar. El resto, las víricas, es conveniente quitarlas ya que son contagiosas”.


¿Las verrugas se pueden prevenir?

Por último, la presidenta de la Ammes comenta que “quizá se puedan prevenir las verrugas víricas con higiene adecuada de manos, no andar descalzos y aplicar métodos de barrera durante las relaciones sexuales. Las verrugas no víricas no se pueden prevenir, pero sí tratarlas en su fase temprana para que no dejen marcas hundidas en la piel cuando se eliminan muy grandes”.

AVISO LEGAL: Toda información proporcionada en este artículo debe ser considerada como una guía informativa y no como un consejo médico. Esta información no reemplaza la atención médica, el diagnóstico, ni el tratamiento que sólo un profesional que lleva la historia clínica puede brindar. Cualquier uso práctico que se le pretenda dar a dicha información deberá ser previamente consultado con un personal de la salud.

* Consultar con un dermatólogo.